Desamparados se sienten los vecinos del sector de Tierras Blancas desde hace algunos meses, debido a las promesas que adquirieron con personal municipal para realizar mejoras en el servicio de atención tanto en el Centro de Salud Familiar (Cesfam) como en el Centro Comunitario de Salud Familiar (Cecof) y que, a juicio de los afectados, no se estarían cumpliendo.
Tras poner en evidencia, hace algunos días, el problema existente con la tardanza en la entrega de medicamentos en el sector de San Juan, fueron cerca de siete dirigentes sociales, miembros de la unión comunal de Tierras Blancas, quienes conversaron con Diario LA REGIÓN, planteando sus inquietudes y manifestaron su disconformidad por el modo como se ha visto el tema de la atención de salud a nivel comunal.
Una de ellas es Carmen Meriño, Presidenta de la Junta de Vecinos Sital, en el sector nororiente (cercano a la quebrada), quien aduce que el mayor problema es el trayecto hacia el Cesfam. «Tenemos que levantarnos a las 5 de la mañana para hacer la fila fuera del consultorio, es preocupante porque tenemos que caminar y si no tenemos medios de transporte, debemos hacerlo a oscuras (…) sería bueno tener un método como el teléfono o más médicos para atender temprano». Además agregó que en reiteradas ocasiones, tanto niños como adultos mayores han debido esperar hasta 3 horas fuera del consultorio, soportando la garúa y el frío.
Opinión similar comparte la presidenta de la junta San Ramón, Silvia Castillo, quien se siente muy preocupada. «Le pediría al alcalde que vea nuestra realidad, que tiene muchos peligros, a veces las niñas jóvenes van a oscuras cargando sus guaguas en brazo, rumbo al consultorio». Añadió que «nos dé una solución, no tan sólo preferencia para adultos mayores y niños, porque los que no lo somos llegamos graves allá y si se acabaron los números, se acabaron».
Otro problema, de tipo sanitario, corresponde al estado en que se encuentran los baños del Cesfam, ubicado en calle Linares con René Schneider. En palabras de la dirigente Castillo, «la mayoría están malos, sólo el de minusválidos está bueno y el personal se enoja si uno lo usa, porque está considerado para esa gente (…) pero desde hace tres meses que los baños del sector de crónicos están malos».
