Fue condenado por la Corte de Apelaciones a 5 años y un día de presidio. Familia del joven muerto en octubre de 2019 lamenta el veredicto y dice que están analizando con el abogado todos los pasos a seguir, «pues marca un mal precedente respecto a lo que pueda suceder en los casos de Romario Veloz, Rolando Robledo y César Véliz…», dijo su hermano.
Para la familia de Kevin Gómez, asesinado por el disparo de un militar en octubre de 2019 en la comuna de Coquimbo, la noticia del veredicto entregado ayer por la Corte de Apelaciones La Serena «fue un balde de agua fría».
Un resultado que no esperaban y que, aseguran, no los dejará iniciar vivir el duelo después de dos años agotadores, toda vez que el cabo primero del Ejército, Cristián Isaac Care Care, fue condenando a la pena de 5 años y un día de presidio efectivo como autor del delito consumado de violencia innecesaria con resultado de muerte.
«La defensa recurrió a la nulidad de la sentencia que impuso el tribunal oral en un inicio, y resulta que le rebajaron a cinco años y un día, cuando en un comienzo lo habían condenado a 12 años», se lamentó Víctor Briceño, su hermano.
Años de pelea
Teme con este resultado que «este tipo en un par de días ande en la calle y te doy firmado que no estará ni cinco minutos en una cárcel. Entonces esa situación nos tiene muy mal, dado que fueron dos años de una dura pelea y sabíamos que nos enfrentábamos a un ente bastante fuerte, pero cuando nos dijeron que le habían dado 12 años íbamos a comenzar a vivir nuestro luto de manera definitiva y ahora nos salen con esto…».
Por lo demás, cree que esta sentencia marcará un mal precedente respecto a lo que pueda suceder en los casos de Romario Veloz, Rolando Robledo y César Véliz.
«Imagínate que en el caso del Kevin se sabía quién era el imputado, puesto que él mismo confesó que había disparado y no había mucho que investigar. Pero de todas maneras se investigó durante dos años, tiempo en que tuvimos muchas trabas y muchas demoras. Entonces si el caso del Kevin era uno de los más claros, me pregunto qué es lo que se espera de los demás casos», se lamenta.
Lo cierto es que la Corte de Apelaciones acogió el recurso de nulidad interpuesto por la defensa del militar -en enero era condenado a la pena de 12 años- y recalificó el delito de homicidio simple, establecido por el tribunal en primera instancia.
La Primera Sala del tribunal de alzada -integrada por los ministros Carlos Jorquera, Rodrigo Díaz y el abogado (i) Fernando Roco- dictó sentencia de reemplazo, reconociéndole al condenado la atenuante de colaboración sustancial al esclarecimiento de los hechos, lo que había sido desestimado por el Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de La Serena».
El fallo agrega que «se estima que su colaboración tiene la calidad de sustancial pues, en virtud de sus declaraciones, Cristián Care Care reconoció los presupuestos fácticos de la imputación, como son su calidad de miembro del Ejército de Chile, su presencia en el lugar de los hechos, el haber sido él quien efectuó el disparo que generó el resultado fatal, y en especial el haber sido él quien cargó el arma que portaba».
Con la ministra
Insiste Víctor que «es un balde de agua fría», pero principalmente por cómo se dieron las cosas, «pues los ministros de la Corte de Apelaciones se basaron en un código judicial militar, cuando esto siempre lo llevó la justicia ordinaria. No sabemos los motivos en que se basaron para esa recalificación, pero nosotros como familia creemos que es una presión política desmesurada».
La impotencia de la familia radica en que «le tiraron cinco años, pero si le restas los 27 meses de prisión preventiva, quedará en menos de tres años y seguramente saldrá con una cautelar. Y ni siquiera será por buena conducta, ya que por menos de tres años sale con firma…».
Por lo mismo, reconoce que están analizando con el abogado todos los pasos a seguir, «toda vez que, si tenemos que recurrir a la Corte Interamericana de Derechos Humanos, lo vamos a hacer. Además, queremos ver la posibilidad de entrevistarnos con el gobierno, ojalá con la ministra de Justicia (Marcela Ríos) porque no sabemos cómo unos jueces califican de una manera, que son los del Tribunal Oral, mientras que los de la Corte de Apelaciones lo hacen de otra y con una diferencia abismante».
