El templo, parroquia o Iglesia Chica como se le denomina, hace varios años que estaba sufriendo el deterioro que le dejó el último terremoto. Las torres y por sobre todo los campanarios tienen la urgente necesidad de ser restaurados y la administración parroquial dirigida por el rector del Santuario, Eduardo Huerta, gestionó los recursos para la restructuración y restauración del templo.
Para el padre Eduardo Huerta, esta restauración es una gran noticia, ya que Andacollo es muy importante a nivel país por su religiosidad.
«Para nosotros es una gran alegría de que el gobierno regional haya tenido esta prioridad, así como lo tuvo con Sotaquí, de restaurar este santuario que es el más importante de nuestro país. De manera que con alegría podemos decir que ese proyecto está totalmente aprobado y que en el plazo de dos meses ya se podría empezar el trabajo».
El gobierno regional ya destinó cerca de 850 millones de pesos, que fueron postulados por el santuario con la ayuda del El Arzobispado de La Serena y también la municipalidad de Andacollo, para que se privilegiara este lugar que es un patrimonio muy valioso, dado que Andacollo es el santuario más antiguo dedicado a la Virgen María en nuestra nación.
«Será un trabajo realizado y dirigido por gente especialista en construcciones antiguas y tenemos la esperanza que quede muy bien restaurado. Conservando toda la belleza del presente y asegurando toda la estructura en esa área fundamental», comentó el párroco.
Este trabajo implicará según las autoridades parroquiales sacrificios e incomodidades para la comunidad religiosa y para toda la el pueblo cristiano de Andacollo, porque la Iglesia Chica quedará un tiempo cerrada. Esto significa además que la imagen de la Virgen María será guardada hasta la Fiesta Chica y todas las cosas del museo, almacenadas en dos archivos de la casa parroquial. El padre Huerta manifiesta no preocuparse por el periodo de tiempo que demorará la restauración, más bien se ilusiona con un buen término de proyecto.
«El periodo de trabajo será como mínimo de unos 6 meses, pero estas cosas se demoran. De manera que estamos totalmente tranquilos sobre el lapso de tiempo que esto signifique para nosotros, con la esperanza que quede un trabajo bien hecho Ya estamos trabajando en el movimiento de las ofrendas a la casa parroquial, realizando anaqueles, para guardar con mucha proligiosidad la riqueza del museo, para no exponerlos a alguna rotura o pérdida».».