Fiscalización de Sernapesca en Coquimbo y Valparaíso permitió desbaratar planta procesadora y comercializadora de productos del mar

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El trabajo coordinado entre las direcciones regionales de Coquimbo y Valparaíso del Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura (Sernapesca) permitió desbaratar una planta procesadora ilegal de machas y ostiones que abastecía a comerciantes de productos del mar en la antesala de Semana Santa, período de alta demanda en el consumo de pescados y mariscos a nivel nacional.

Primeramente, en Viña del Mar, se detectó un vehículo que cargaba 56 mallas de macha fresca, correspondientes a 1.120 kilos de dicho recurso, además de 17.500 unidades de ostión, que iban a ser comercializadas en Valparaíso. Al día siguiente, en Tongoy, un operativo multisectorial dio con una vivienda particular que funcionaba como procesadora de recursos hidrobiológicos, sin contar con las autorizaciones para ello, incautándose en dicho lugar más de 2 toneladas de pescados y mariscos listos para su procesamiento y comercialización durante Semana Santa.

De ellas 1.093 kilos eran de macha: 984 kilos en media concha y 109 en lengua, almacenada en potes. «Actualmente la macha está en veda y solo se puede extraer desde las Áreas de Manejo y Explotación de Recursos Bentónicos (AMERB) autorizadas, por lo que se presume que esta planta ilegal recibió recursos que pudieron ser sustraídos desde las áreas de manejo o bien de áreas no autorizadas de la Región de Atacama, donde también se están realizando controles de parte de Sernapesca. Estos recursos que se incautaron eran distribuidos no solo en esta región, sino que en otras zonas como Valparaíso», expresó Cecilia Solís, directora regional de Sernapesca Coquimbo.

La autoridad agregó que «el procesamiento de recursos en veda constituye un delito, por lo que se presentará una querella criminal contra quienes resulten responsables, esto sin perjuicio de las denuncias ante los tribunales civiles correspondientes». Ante la proximidad de Semana Santa, época de aumento en el consumo de pescados y mariscos, Solís recalcó que «por la mayor demanda existe un riesgo de mayor detección de origen ilegal, por lo que se están intensificando los controles en la región».

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